Mira al mar, tranquila, yo te estaré observando desde atrás, estaré ahí aunque tu no lo veas. Fotografíaré tu rostro para ver la imagen que representa que todavía aguardas mi llegada. Quizás pueda salir de mi escondite y mirar contigo, nos sentaríamos y los granos de arena ararían registrando ese momento superando la ficción fácilmente.
Después pasearíamos, la playa está tranquila por la noche y las olas agitan el ritmo acompasado de los pies al unísono. El agua roza el talón y la brisa mi rostro... es una sensación genial... porque no sonreir?
Y bueno, cuando llegue la hora de soñar, me quedaré mirándote... quizás pase delicadamente alguno de mis dedos por tu pelo ayudandote a respirar lentamente, quizás te robe unas buenas noches como sabes que lo haría...me quedaré la noche soñando con tus sueños... no me iré a ninguna parte, porque quiero continuar sonriendo mucho tiempo.
Buenas noches, sueña con cosas bonitas.
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